Cómo elegir la mejor teja para nuestro tejado

Las tejas son uno de los elementos principales de nuestros tejados y son cruciales para evitar filtraciones de agua y humedades en el hogar. Así mismo, las tejas de calidad y bien instaladas favorecen el aislamiento térmico, a la vez que proporcionan un techado con ventilación natural por su forma, material y tipo de instalación, evitando la condensación de aire y las posibles humedades. Por estos motivos es fundamental elegir las tejas idóneas pensando en una mayor durabilidad y rendimiento de las mismas.

La mayoría de los tejados en España, tradicionalmente tienen el acabado en teja cerámica. Las tejas están fabricadas a partir de material arcilloso y con métodos que las hacen resistentes al agua y la tracción.

La colocación de la teja es tan importante como su calidad. Las tejas deben colocarse solapadas para evitar que entre el agua entre ellas.

Entre las características principales de las tejas cerámicas se encuentran la impermeabilidad, el aislamiento térmico y acústico, la resistencia a las heladas y la estanqueidad al aire o al vapor. Son tan resistentes que se podría hasta pisar sobre ellas sin que se rompieran.

Presentamos los tipos de tejas cerámicas:

• Teja curva. También conocida como la teja árabe. Es la más extendida en los tejados españoles. Es la más sencilla y polivalente, ya que con una misma teja, se puede cubrir todo el tejado. La forma es tronco-cónica y tiene diferentes anchos de curvatura en sus extremos, lo cual permite que pueda utilizarse como canal o como cobija. El tamaño más común es de 110 mm, 150 mm y 400 mm de largo, pero puedes encontrar tejas de otros tamaños. El tono y acabado de las tejas es fundamental para el aspecto decorativo de la vivienda o comunidad de propietarios. Se pueden mezclar tejas de varios tonos. Su diseño es atractivo y rompe con lo convencional, permitiendo evitar atascos de agua.
• Teja plana. Otra de las tejas más extendidas, también conocida como teja alicantina, es tradicional y aporta una visión estética diferente. Se trata de una opción clásica a la vez que versátil. La medida estándar de la teja plana es de 430 mm de largo, por 252 mm de ancho. Es muy sencilla de colocar, su encaje es perfecto, su forma permite un acoplamiento entre unas y otras que impide que se desplacen con facilidad. La colocación habitual de esta teja se lleva a cabo sobre rastreles, normalmente de PVC. Este tipo de instalación permite un ensamblaje guiado, ya que se acoplan unas piezas sobre otras sin posibilidad de error y con sujeción al rastrel. También se pueden atornillar a través del orificio habilitado para ello. La teja plana tiene dos canales, que recogen el agua que va cayendo de unas a otras. Los nervios naturales son lo suficientemente altos y pronunciados como para que el agua fluya sin posibilidad de retención. Para rematar la cumbrera o caballeta hay que emplear teja curva o mixta.
• Teja mixta o teja romana. Une en una misma pieza la canal y la cobija, por lo general, la canal es plana y la cobija es curva. Actualmente, es de las más utilizadas en el remate de tejados antiguos o en la construcción de nuevos tejados. Hay una gran variedad de tejas mixtas y los acabados son múltiples, según la configuración estética, pero su forma y colocación es muy similar. Se pueden colocar directamente sobre el soporte rígido de la cubierta o sobre rastreles. Las estrías, topes frontales, y laterales, hacen al igual que con las tejas planas, que la instalación de un tejado sea más chimbrada. La instalación de una teja te lleva a colocar la siguiente sin posibilidad de error, y cuentan con un orificio para colocar el tornillo. Permiten una uniformidad, dejando una imagen exterior coordinada.
• Teja esmaltada: El esmalte en las tejas cerámicas ofrece diversos colores y acabados, favoreciendo el reflejo y la absorción de los rayos del sol.

Aparte de las tejas cerámicas, existen otras opciones que pueden interesarte:

Teja de hormigón: Cuenta con una buena resistencia mecánica, mayor peso y menor absorción de agua que una teja cerámica. Son aconsejables en zonas climáticas fríos, por resistir mejor heladas y vientos. La teja de hormigón requiere de aditivos ya que el hormigón puede dar problemas si no está correctamente hidrofugado (sobre todo si se queda el agua en la teja y se llega a congelar). Su principal ventaja es la facilidad para dotar de planeidad a las tejas de forma económica.

Teja de vidrio: Es reciclables y dura, habitualmente se encuentran sobre una base de nylon negro, que absorbe el calor y lo lleva al aire que circula por debajo de las tejas, permitiendo reducir los costes de calefacción.

Teja de PVC: ligeras y resistente a agentes químicos y corrosión. Tienen un buen sellado y no absorben el agua, por lo que pueden limpiarse con facilidad.

Teja PET: Fabricadas con botellas de PET recicladas, son muy ligeras, económicas y resistentes a la biodegradación. Se presentan en diferentes dimensiones y diseños.

Teja metálica: Livianas y fáciles de instalar. Generalmente no ofrecen una buena aislación térmica, provocando un incremento en la temperatura interior. Es necesario considerar la oxidación y corrosión dependiendo del tipo de metal y su recubrimiento.

Teja asfáltica: Comúnmente llamada tégola. Generalmente se componen de laminado asfáltico y material de refuerzo, como por ejemplo granos cerámicos. Se encuentran en diversos diseños y espesores. Son económicas, aunque tienen una menor vida útil respecto a otros materiales.

Teja fotovoltáica: Permiten la producción de energía eléctrica, aunque su costo de instalación y producción es alto. La eficacia del sistema se ve comprometida por la orientación solar.

Teja de madera: Generalmente están compuestas por madera de pino y correctamente instaladas, ofrecen una protección duradera junto con una estética rústica. Su colocación es sencilla y son respetuosas con el medio ambiente.

Teja de pizarra: Son placas planas de roca de diferentes medidas y formas. Deben tener una buena sujeción, ya que se ubican en cubiertas con alto grado de inclinación con el fin de favorecer el desagüe.

 

Piezas especiales

Como un tejado puede tener muchas formas, existen algunas piezas especiales:

• Caballetes: Son las tejas de remate para cumbreras y limatesas. Son las más habituales. Sirven para rematar las uniones de un tejado en la cumbrera o limatesa.
• Laterales: Son tejas en ángulo recto para los laterales. Algunas tienen los dos lados de igual tamaño o desigual tamaño. Hay piezas para derecha e izquierda y también universales, que sirven para cualquier lado.

Estos suelen ir sujetos con cemento o mortero y luego una capa de impermeabilizante pero nosotros preferimos poner chapa ya que el mantenimiento es menor y el tejado ventila más.

Como complemento para la instalación de las tejas y fijarlas al soporte se suele emplear espuma de poliuretano especial para tejados y, en su caso, rastreles de madera o metálicos.

A la hora de colocar las tejas, se suelen utilizar diversas herramientas para una perfecta sujección: espátulas, paletas, talochas, etc.

El tejado puede representar hasta el 60 % de la vista exterior de la vivienda; por lo tanto, merece atención, tal como le dedicamos al diseño interior. A la hora de elegir la mejor teja, la más idónea para nuestro tejado, hemos de tener en cuenta las siguientes variables:

• La zona de aplicación. Las condiciones climáticas y la ubicación geográfica deben ser criterios clave a la hora de seleccionar el tipo de teja, entre los materiales y colores disponibles. Existe un índice general por zonas climáticas, que marca de la letra A hasta la E.
• El aislamiento térmico que proporcionan. Debemos buscar tejas que ofrezcan al tejado la capacidad de mantener la temperatura del interior de la vivienda en condiciones favorables pese al clima.
• La resistencia a posibles incendios. Es importante que la teja que elijamos no genere gases tóxicos ni se derrita ante temperaturas extremas.
• El aislamiento acústico que permiten, frente a los ruidos exteriores.
• Durabilidad del material. Es conveniente revisar los componentes de la teja y evaluar su durabilidad, así mismo, es importante revisar los desagües laterales y cauces del agua para evitar la estanqueidad.

¿Te haces una idea de qué tipo de tejas te convienen más para tu tejado?

En cualquier caso, hay que tener en cuenta, vivas en la zona climática que vivas, que cada producto está  o material cumple con determinados criterios, por lo que es muy importante contar con asesoramiento profesional a la hora de elegir los mejores sistemas para tu cubierta.