Cámaras de aire: La importancia de que los techos estén ventilados

25 octubre, 2021/en Construccion /por Rubén

Entre los elementos externos de un edificio encontramos las fachadas y las cubiertas, que protegen las viviendas. En función de la construcción que tenga, una cubierta puede estar ventiladas o no ser transpirable. Estos conceptos se han aplicado desde hace muchos años tanto en zonas frías y húmedas como en zonas calorosas y secas.

El modo habitual de ventilar los techos es la creación de una cámara de aire entre la cubierta y el techo. Esta cámara de aire permitirá la ventilación, que favorecerá el aislamiento térmico y acústico de las estancias, a la vez que mejorará la eficiencia energética del edificio.

¿En qué consisten las cámaras de aire?

Las cámaras de aire son espacios huecos en la parte superior del techo de la última planta de un edificio o vivienda. Las cámaras de aire son más fáciles de encontrar en tejados a dos o más aguas, ya que se aprovecha la pendiente que éstos ofrecen para poder instalar la cámara de aire. En las cubiertas planas, en cambio, es más difícil de conseguir.

El objetivo que se consigue creando una cámara de aire no habitable es que el aire circule y que por lo tanto el calor recluido por el revestimiento exterior sea menor, previniendo la condensación de techos y paredes.

De acuerdo a la legislación, todas las nuevas edificaciones deben contar con una cubierta ventilada para cumplir con el código técnico de edificación.

Las cubiertas ventiladas consisten en un sistema compuesto por dos áreas separadas por una cámara de aire ininterrumpidamente ventilada.

Esta cubierta elimina y protege a la vivienda de la radiación solar evitando el recalentamiento de las plantas inferiores en verano, y aumentando la resistencia térmica del interior del edificio frente al frío en invierno.

Otra de las características de tener los techos ventilados es la eliminación y protección frente a los problemas de humedades y condensación en el interior de la vivienda.

Ventajas de tener los techos ventilados

Son numerosas las ventajas que ofrecen las cámaras de aire que ventilan los techos:

Aseguran el aislamiento térmico

Como hemos hablado en el apartado anterior, el aislamiento térmico es una de las ventajas de instalar cámaras de aires en una vivienda.

Gracias a ellas, la sensación térmica tanto en invierno como en verano será menor, pero además ayudamos a prevenir las temidas humedades y la condensación y otros problemas que tienen lugar habitualmente en el interior las viviendas.

Aumentan la eficiencia energética

Las cámaras de aire en una cubierta ventilada ayudan automáticamente a suavizar los cambios bruscos de temperaturas.

En verano son capaces de reducir el calentamiento que se pueda producir por los rayos del sol renovando el aire caliente por el sistema de la ventilación, y evitando que se cree un efecto horno en su interior.

En invierno, por el contrario, las cámaras de aire en los techos ayudan a que el calor generado en el interior de la vivienda no se evapore, a la vez que no dejan pasar al frío.

Estas acciones se traducen en una mejora de la eficiencia energética, generando importantes ahorros a la hora de mantener los sistemas de calefacción y aires acondicionados. De esta forma resultan más respetuosos con el medio ambiente además de tener un beneficio económico para las familias.

El sistema de cámaras de aire permite el rápido secado del agua de lluvia o nieve, evitando la condensación y las humedades y goteras producidas por las filtraciones. Estas cubiertas ventiladas son ideales tanto en zonas lluviosas y frías como en zonas cálidas.

Mejoran el aislamiento acústico

El sistema de cámaras de aire ayuda al aislamiento acústico de las viviendas gracias al aire condensado en su interior, evitando así el traspaso del ruido que se genera en las cubiertas. Por ejemplo, el ruido provocado por las lluvias, los granizos, fuertes vientos o incluso ruidos derivados del paso de animales por la superficie del tejado.

Como puedes comprobar es muy importante que los techos estén correctamente ventilados. Unos sistemas de cámaras de aire bien instalados pueden evitar problemas en el futuro y harán más confortable tu vivienda. Las cámaras de aire que ventilan los techos ayudan a la prevención de humedades y goteras que se puedan generar en las viviendas, pero además nos ayudarán a ahorrar en la factura de la luz.

Desde Cubiertas Sierra podemos informarte sobre la cámara de aire idónea para tu vivienda, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

Orientación e inclinación de las cubiertas: el ángulo óptimo

14 octubre, 2021/en Construccion /por Rubén

A la hora de construir la cubierta de una casa lo ideal es saber qué tipo de cubiertas se pueden montar y cuál es la mejor orientación para hacerlo, de acuerdo a criterios como la latitud, longitud, la zona y la orientación solar.

A continuación hablaremos de la orientación e inclinación de las cubiertas y de cómo alcanzar el ángulo óptimo, para prevenir problemas en las cubiertas en un futuro.

Tipos de inclinación de las cubiertas

Cubiertas Planas

Como el mismo nombre indica esta cubierta no tiene grandes pendientes, se caracteriza por ser plana, aunque se deja una pequeña inclinación para ayudar al desagüe de las aguas de lluvias y otros materiales que pudieran caer sobre la misma y dañarla.

Se suelen usar en zonas con un clima cálido y no muy lluvioso. Se aconseja impermeabilizar la cubierta para así evitar goteras y filtraciones.

Cubiertas inclinadas

Las cubiertas inclinadas se suelen usar en zonas geográficas donde hay abundantes lluvias o nevadas. El objetivo es que no se acumule la nieve en los techos produciendo daños importantes en las edificaciones debido al peso de la nieve, especialmente cuando se convierte en hielo.

Este tipo de cubiertas son las más utilizadas actualmente y se las considera inclinadas cuando tienen una pendiente superior al 10%.

Dentro de las cubiertas inclinadas hay varios subtipos:

Tejado en un agua. Se caracteriza por tener solo un lado de la cubierta inclinada.
Tejado a dos aguas. El tejado tiene dos caídas permitiendo la bajada de agua y nieve de forma homogénea para no dañar la estructura.
Tejado a cuatro aguas. Cuenta con cuatro vertientes distintas unidas por el medio.
Este tipo de cubiertas puede tener cuatro o incluso más vertientes.

Además de los tipos de cubiertas según su inclinación, la orientación que les demos en la construcción puede dar lugar a ventajas e inconvenientes durante la vida útil de la cubierta. A continuación detallamos los tipos de orientación posibles que se le pueden dar a una cubierta.

Tipos de orientación de las cubiertas

Orientación sur. Una de sus características principales es que recibe la luz del sol durante todo el día. Por ello, esta orientación es muy recomendable en zonas geográficas con climas fríos.

Orientación norte. Por el contrario, la orientación norte de las cubiertas está más indicada en zonas geográficas donde el clima es más cálido.

Orientación este. La principal característica de la orientación este es que el sol incide por las mañanas. Puede ser una alternativa factible para las viviendas de orientación sur sobre todo en climas cálidos.

Orientación oeste. La orientación oeste recibe la luz del sol desde el mediodía hasta el ocaso, aunque no tiene muy buena fama, puede ser ideal para zonas frías, ya que se concentran las horas de mayor calor.

Como podemos comprobar, elegir la orientación de la cubierta no es sencillo y los criterios mencionados no se deben llevar a rajatabla. Hay muchos otros factores que pueden influir a la hora de decidir el tipo de orientación y el tipo de inclinación de una cubierta.

¿Cuál es el ángulo óptimo?

El ángulo óptimo para enfocar una cubierta depende de múltiples factores. El más importante de ellos es el clima atmosférico. Según en qué zona geográfica se encuentre la vivienda, será más adecuado elegir una inclinación de la cubierta, al igual que los materiales de construcción.

De forma orientativa, en zonas cálidas lo más recomendable son las cubiertas planas porque no hace falta desaguar una gran cantidad de agua y de esta forma se ayuda a que no se proyecte el sol, así como una orientación norte, porque el sol incide de manera menos directa y por lo tanto, las viviendas serán más frescas.

En cambio, en zonas frías, lo más recomendable son las cubiertas inclinadas para ayudar a la caída de la lluvia y de la nieve, evitando así que se deteriore la cubierta por su peso. Así mismo, una orientación sur permitirá la incidencia directa del sol y por lo tanto la vivienda tendrá más calidez.

En esta elección juegan muchos elementos para poder decir cuál es el ángulo óptimo de inclinación de la cubierta de una vivienda.

No siempre puedes elegir la orientación que quieres para tu vivienda, esto no quiere decir que no tengas un ángulo óptimo para construir la cubierta de tu vivienda.

También hay que tener en cuenta los gustos personales, puedes ser una persona que aunque vivas en una zona cálida te guste la luz del sol y por tanto, no te importe tener la cubierta orientada al sur.

La orientación de la vivienda y la inclinación del tejado no es la única cuestión a la hora de cuidar y mantener las cubiertas. Otros factores como la vegetación que haya cerca de la vivienda o si es un edificio comunitario también son factores que hay que tener presentes.

¿Te has planteado cambiar tu tejado de pizarra a teja?

5 octubre, 2021/en Construccion /por Rubén

El tejado es un elemento indispensable de una vivienda y pocas veces se le da el trato y el reconocimiento que merece. Con el paso del tiempo y las inclemencias meteorológicas los tejados suelen presentar defectos. Si tienes un tejado de pizarra, ¿te has planteado cambiar tu tejado de pizarra a teja?

Cuando te planteas cambiar el tejado conviene que tengas en cuenta varios aspectos, entre ellos la ubicación de la casa, el presupuesto que quieres invertir en la reparación o sustitución del tejado, tus gustos personales o la estética que se quiera mantener en la vivienda, etc.

Un tejado de pizarra es ideal para lugares fríos donde nieva. Cuando un tejado tiene una inclinación bastante pronunciada es preferible poner un tejado de pizarra, pero el mayor inconveniente es el precio. La pizarra, al ser un elemento natural, aumenta bastante el presupuesto de un tejado.

En cambio, un tejado de tejas resulta más económico e igualmente duradero y versátil. La construcción adecuada de un tejado puede ahorrarnos bastante dinero a largo plazo. Además, supone un importante ahorro energético, ya que gracias al aislamiento evitamos que el frío y el calor pasen a la vivienda.

Ventajas de colocar tejas en tu tejado

Las tejas pueden ser un elemento decorativo de la vivienda y mucho más. Las tejas sirven para aislar y proteger la vivienda de fenómenos meteorológicos como la lluvia, el viento, la nieve e incluso del sol.

Las ventajas de colocar tejas en tu tejado son las siguientes:

Las tejas aislan. Las tejas son un perfecto aislante térmico y acústico. Por ello, resultan ideales para lugares con temperaturas extremas, tanto frías como cálidas. Además resultan cómodas en la ciudad, ya que como aislante acústico te ahorrará malestares derivados de los ruidos de la urbe.
Están compuestas de material ignífugo. Los materiales ignífugos que componen las tejas protegerán tu vivienda frente al fuego haciendo de tu tejado un componente más fuerte y duradero.
Mantienen la ventilación del techo. Es un aspecto imprescindible de un tejado si quieres que tenga una vida útil más larga y sea eficaz. Tener este aspecto en cuenta en la fase de construcción de un tejado, permite prevenir reparaciones muy costosas con el tiempo.
Canalizan el agua, las hojas o la nieve. Las tejas, bien colocadas, evitan el estancamiento de estos elementos, los cuales pueden causar filtraciones o males más graves en tu tejado.
Son versátiles y ofrecen variedad de materiales, estilos y colores. Puedes encontrar tejas de muchos materiales diferentes, pudiendo elegir para tu hogar las que más te convengan o te gusten.

Existen diversos tipos de tejas que puedes encontrar en el mercado, cerámicas, de arcilla, de madera, metálicas, de cemento, etc.

Sabiendo las ventajas y características que tiene un tejado de teja y los diferentes tipos que existen, ¿te plantearías cambiar tu tejado de pizarra a teja?

Si la respuesta es sí, en Cubiertas Sierra podemos ayudarte a decidir qué tipo de tejado es más conveniente para tu vivienda. Así que, si estás pensando en cambiar tu tejado, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

9 Trucos para aislar tu casa del calor

27 junio, 2021/en Construccion /por Rubén

Hoy en día hay muy pocas casas que no cuenten con un aire acondicionado o bombas de calor, las nuevas tecnologías nos permiten mantener nuestras casas calientes o frías en función de nuestras necesidades, pero muchas veces no estamos teniendo en cuenta el gasto energético que esto supone, un perjuicio tanto para nuestros bolsillos como para el medio ambiente. Te recomendamos aislar tu casa del calor para no sufrir el verano, sino disfrutarlo.

Llega el estío a Madrid, que se caracteriza por un clima muy caluroso y seco, debemos preparar nuestra casa para el calor intenso, no solo mediante la instalación de aparatos eléctricos que nos pueden ayudar a aliviar momentáneamente esos calores, sino también mediante otras acciones que son mucho más beneficiosas para el medio ambiente y a la larga mucho más económicas para nuestros bolsillos.

Además estas acciones no solo nos aislarán del calor, sino también del frío y del ruido, por lo que es mucho más efectivo aislar una casa que llenarla de aire frío o caliente.

Trucos para aislar tu casa del calor

Instala ventanas de doble acristalamiento o con rotura de puente térmico. Por las ventanas es por dónde entra la luz solar y también el frío, por tanto, las ventanas de doble acristalamiento son una gran solución para aislar nuestro hogar.
Revisa que las ventanas y puertas estén bien ajustadas y aisladas, que no haya grietas por dónde se filtre el frío o el calor, instala burletes en las puertas (tiras flexibles de material aislante).
Utiliza toldos, pérgolas, cortinas y persianas. Estos materiales ayudarán a evitar que el sol entre directamente en casa y por tanto que vaya aumentando la temperatura del hogar. En invierno también es conveniente el uso de alfombras que nos ayudarán a mantener nuestro suelo aislado del frío.
Mantén una temperatura constante del aire acondicionado, limpia los filtros del aire y lleva ropa ligera y cómoda en casa.
Ventila las estancias sobre todo pronto por la mañana o tarde en la noche, en las horas de menos calor, el resto del tiempo mantén la casa cerrada para no dejar entrar el calor.
Utiliza pinturas térmicas que ayudan a evitar que el calor entre en tu casa. Son pinturas aislantes que actúan de colchón térmico.
Aísla tu fachada mediante un revestimiento que se fija sobre la pared y que permite que se genere una cámara de aire entre éste y el aislamiento térmico o también puede hacerse mediante el Sistema de Aislamiento Térmico Exterior (o también llamado Sistema SATE) en el cual encolamos la fachada y fijamos poliestileno con placas de anclaje, lo que ejerce de aislante duradero y funcional.
Aísla tus paredes mediante una doble pared con planchas de yeso laminado con una separación de la pared de entre 8 a 12 centímetros incluyendo una cámara de aire, o también mediante lana de roca o porexpán. También se puede usar el pladur, que es el más popular y el que más variedades ofrece.
Aísla tu cubierta, puesto que es la parte que nos protege del sol en verano y del frío en invierno y debe de estar bien aislada para evitarnos graves problemas. En este caso podemos usar lana mineral que además actúa de aislante acústico aunque el material más usado es el poliestireno extruido.

Como ves, podemos mantener nuestra casa fresca en verano gracias tanto a pequeñas acciones que podemos realizar nosotros mismos como con pequeñas reformas o con un buen planteamiento antes de construir una casa gracias a materiales aislantes que nos ayudarán a tener un consumo energético más moderado.

Siempre es mejor pedir asesoramiento a profesionales que nos indicarán cuál es el material que mejor se adapta a nuestra situación y necesidades específicas.

Los mejores tejados para porches

17 mayo, 2021/en Construccion /por Rubén

Si queremos construir un porche debemos tener en cuenta varios aspectos antes de ponernos a construirlo, por lo que debemos analizar qué tipo de porche es mejor para nosotros. Existen varios tipos de porches y varios precios dependiendo del material que utilicemos.

Por un lado tenemos los porches de madera, que aunque son los más económicos debemos tener en cuenta que debido al material y a las condiciones meteorológicas necesitará un mantenimiento periódico. Se suelen construir sobre todo en entornos rústicos y se hacen con maderas resistentes al sol y a las inclemencias del tiempo. Se les aplica tratamientos protectores y aislantes para hacerlos más resistentes, pero aún así se debe realizar un mantenimiento periódico a la madera.

El siguiente tipo de porche que tenemos es el de hierro y aluminio, que son menos económicos que los anteriores pero no necesitan tanto mantenimiento. Estos materiales son muy resistentes, fáciles de instalar y ligeros. Debemos tener en cuenta que normalmente estos materiales se emplean para hacer cerramientos. En este caso el precio del porche dependerá del tipo de cerramiento que escojamos.

Por último tenemos los porches de obra que son aquellos que requieren, como su nombre indica, materiales de obra, por lo que su instalación necesita más tiempo y tienen un precio más elevado, aunque sus ventajas son que se adaptan perfectamente a la estructura de la casa y son, evidentemente más resistentes. Se puede hacer con distintos materiales que harán encarecer más o menos la obra.

Una vez tenemos la estructura de la obra debemos pensar en la cubierta y en el tipo de material de la cubierta que deberá ser resistente y ofrecer un perfecto aislamiento puesto que no queremos que nos aparezcan goteras o se nos hunda la cubierta ante la primera inclemencia climática.

Hay varios tipos de materiales que podemos utilizar en las cubiertas:

Tejas de plástico: Perfectas para estructuras de madera y aluminio ya que, además de ser muy ligera y resistente, existen diversos acabados, colores y modelos.
Placa bajo teja: Sirven para impermeabilizar porches y cubiertas además de cualquier tipo de construcción.
Placas y cubiertas de policarbonato: Son translúcidas por lo que permiten pasar la luz y claridad.
Panel Sandwich bajo teja: Mucho mejor que la teja tradicional ya que estas se suelen romper y desgastar, en cambio este material imita a la teja tradicional con un aislamiento térmico formado por dos chapas de acero galvanizado y precalado. Estas dos chapas protegen un núcleo aislante de poliuretano que ofrece una gran protección y aislamiento térmico. Además imita a la teja tradicional y tenemos la opción de escoger entre distintos modelos y colores. Este tipo de tejado para porche es muy económico y versátil.
Cañizo: De los más económicos pero también de los más endebles, así que no es muy recomendable debido a su poca resistencia.
Tejas asfálticas: Bastante económicas y de fácil instalación aunque a la vista no queden muy estéticas. Ofrecen una buena resistencia.
Tejas de cerámica: Se usan normalmente con porches de madera para dar un aspecto rústico y también se pueden usar tejas de pizarra u hormigón, son muy resistentes.
Fibrocemento: Se pueden combinar con algún tipo de aislamiento lo que puede encarecer su precio. Es una de las opciones que más se usan al ser ligeras y económicas.
Cristal: La ventaja más evidente es que dejan pasar la luz y se suele usar en porches de aluminio. La mayor desventaja es su elevado precio.

Una vez tenemos toda esta información ya podemos empezar a planificar cómo será nuestro porche o pensar en cambiar su tejado por otro material que nos convenga más.

Tipos de impermeabilizantes para cubiertas

17 mayo, 2021/en Construccion /por Rubén

Las cubiertas de las viviendas y edificios son las superficies que están más expuestas a sufrir filtraciones de agua, por lo que resulta imprescindible impermeabilizarlas ya que los materiales impermeabilizantes actúan como un paraguas protector sobre la superficie, lo que impide que el agua pase a través de él.

Existen numerosos tipos de materiales impermeabilizantes para las cubiertas, que podemos clasificar en cuatro tipos:

Impermeabilizantes metálicos: Se suelen usar puntualmente y son materiales como el plomo, el acero galvanizado, el zinc o el aluminio natural o lacado.
Impermeabilizantes naturales: El más utilizado es el látex y da lugar a:
1. Clorocaucho: que se mantiene estable a la intemperie, su duración es de más o menos 2 años y se aplica en frío.
2. EPDM: su duración es mayor, unos 3 años, y también se aplica en frío.
Impermeabilizantes pétreos: Son los que más duración tienen con un mínimo mantenimiento. En este caso encontramos:
1. Silicona: en estado líquido y con una duración de unos 2 años.
2. Cementosos: también duran unos 3 años y pueden ser o no transpirables.
3. Cerámicos: como las tejas, que duran unos 5 años y además son ecológicos.
4. Fibrocemento: es un derivado del cemento con fibras de vidrio de refuerzo. Es el material más duradero, sobre unos 50 años.
Impermeabilizantes sintéticos, entre éstos, encontramos:
1. Resinas poliméricas: se aplican en caliente.
2. Resinas acrílicas: se aplican en frío.
3. Resinas Epoxi: en frío.
4. Poliuretano: en frío.
5. Láminas impermeables transpirantes: compuestas por un tejido plástico formado por fibras que hacen de cortavientos.
6. Telas asfálticas: están indicadas para las impermeabilizaciones bituminosas.
7. Impermeabilizante nanotecnológico: es el material más novedoso ya que está realizado con una formulación a escala atómica que garantiza la estanqueidad y la transpirabilidad.

En el mercado podemos encontrar muchos materiales impermeabilizantes pero debemos distinguir entre todos los que existen, los que son mejores y más adecuados para nuestras terrazas, cubiertas y azoteas.

Tenemos muchos materiales distintos por lo que vamos a centrarnos en los más comunes:

Membranas líquidas: Se aplica una primera capa de imprimación y a posteriori varias capas de polímeros. Tienen una buena durabilidad y son muy flexibles.
Membranas de poliuretano: funcionan mejor en superficies a la intemperie pero son muy sensibles a la humedad. Su característica principal es la flexibilidad.
Impermeabilizantes elásticos: Están elaborados a base de co-polímeros acrílicos y proporcionan una elevada elasticidad, por lo que son muy resistentes a dilataciones y contracciones.
Impermeabilizantes asfálticos: Están compuestos por poliéster, agua emulsionada y fibras de vidrio que aportan mayor resistencia y durabilidad al sistema.
Impermeabilizantes cementosos: Se caracterizan por ser altamente resistentes a la intemperie, lo que hace que sean muy versátiles y propicios tanto para climas templados como para fríos. Otras de sus características principales son que evitan la aparición de salitre, lo que los hace ideales para las cubiertas, terrazas y azoteas de zonas de costa además de ser un material muy duradero.
Impermeabilizantes acrílicos: son muy similares a la pintura de exterior ya que es un impermeabilizante líquido y está formado por resinas sintéticas y fibras de vidrio. Aquí encontramos a los que tienen como base resinas acrílicas.

Como se puede comprobar existen muchos tipos de materiales que nos ayudan a proteger nuestras cubiertas y es muy importante conocer tanto estos materiales como las condiciones climáticas de la zona para poder escoger el que mejor se adecúe a nuestras necesidades, por lo que siempre recomendamos que se acuda a un experto que nos pueda asesorar sobre qué tipo de material es el idóneo para nuestra cubierta.

Tipos de cubiertas

3 marzo, 2021/en Construccion /por Rubén

Las cubiertas o también llamadas tejados son los elementos que finalizan la construcción de un edificio, aunque es lo primero que se suele construir después de la cimentación.

La finalidad principal de las cubiertas es, en primer lugar, la protección de las edificaciones ante los agentes externos que pudieran provocar daños y, en segundo lugar, mejorar su apariencia estética.

Un asunto relevante, aparte de los materiales de las cubiertas, es la inclinación. Principalmente podemos mencionar dos tipos de cubiertas de construcción dependiendo de la pendiente: las planas y las inclinadas.

Cubiertas inclinadas

Una cubierta se puede considerar inclinada cuando su pendiente supera el 10%. Los planos inclinados que contiene se llaman faldones. En función del número de vertientes de evacuación del agua de lluvia que tenga la cubierta puede ser a un agua, a dos, a cuatro aguas, con faldones y de pabellón. Los materiales son variables: pizarra, madera, tejas, chillas, paja, metal.

Cubiertas planas

Cuando la cubierta posee un 3% de inclinación únicamente, se denomina plana. Se trata de la mínima inclinación que debe tener la cubierta para poder evacuar el agua de lluvia.

Existen diversidad de cubiertas planas: invertidas, transitables (azoteas), verdes (con capa de tierra y vegetación) e inundadas (de agua).

Aparte de la pendiente, dentro de esas dos categorías se contemplan variaciones de acuerdo a los materiales y formas. Habitualmente se emplean en la fabricación de cubiertas diferentes materiales como: fibrocemento, paneles sándwich, zinc, o chapas de acero galvanizado, entre otros.

Las coberturas asfálticas y opacas más comunes son las plásticas imitando a la teja, asfálticas, tégolas de diferentes diseños y coberturas metálicas.

Los remates que podemos encontrar en los acabados, puede ser: de cumbrera plástica o metálica, faldón lateral en los mismos laterales o terminal lateral de cumbrera.

Las cubiertas para una caseta de jardín, una nave o un taller de trabajo, una pérgola o un aparcamiento pueden ser opacas, translúcidas o transparentes.

Opacas

Las cubiertas opacas consisten en planchas bituminosas, fabricadas a partir de material asfáltico. Son muy resistentes y fáciles de instalar y de gran tamaño. Son flexibles y manejables y se pueden cortar a medida. Existen diferentes ancho de onda.

Tégola

La tégola es asfáltica y está reforzada con fibra de vidrio. El acabado es granulado de diferente color. Se trata de un producto muy resistente al agua y a los cambios de temperatura. Hay modelos de distinto tamaño, ondulados o planos y se solapan unas sobre otras, ya que cada plancha trae un rebaje para su encaje.

Planchas plásticas

Las planchas plásticas imitan a las tejas tradicionales y son una variedad muy utilizada. Algunas tienen incluso un aspecto envejecido. Están fabricadas en material de plástico rígido, son poco pesadas y por ello se manejan bien. Son resistentes a los cambios de temperatura y son muy útiles en tejados inclinados.

Planchas metálicas

Habitualmente tienen forma trapezoidal o forma de teja. Los materiales que las componen suelen ser el acero, zinc, aluminio o el cobre. Su uso es más habitual en techos de garajes y naves. Ofrecen un importante aislamiento frente a las temperaturas extremas, cuentan con un acabado estético y variedad en la gama de colores y son sencillas de limpiar.

Paneles sándwich

Estos paneles incluyen el aislante acústico y térmico. Se les llama panel sándwich porque están compuestos de una capa exterior, el aislamiento en el medio y una plancha decorativa en el interior. Existen en varios colores y acabados, con diverso grosor de la capa de aislamiento. Presentan diversas formas exteriores con paneles ondulados y planos, con acabado plástico o de aluminio. Son paneles apropiados para naves de ganado o talleres, para grandes pérgolas o aparcamientos.

Son numerosas las opciones y sin conocer bien los materiales podemos elegir una opción que por algún motivo no se adecúe al espacio que queremos techar. Para consultar qué tipo de cubierta es la más conveniente para ti, escríbenos.

Cómo elegir la mejor teja para nuestro tejado

3 marzo, 2021/en Construccion /por Rubén

Las tejas son uno de los elementos principales de nuestros tejados y son cruciales para evitar filtraciones de agua y humedades en el hogar. Así mismo, las tejas de calidad y bien instaladas favorecen el aislamiento térmico, a la vez que proporcionan un techado con ventilación natural por su forma, material y tipo de instalación, evitando la condensación de aire y las posibles humedades. Por estos motivos es fundamental elegir las tejas idóneas pensando en una mayor durabilidad y rendimiento de las mismas.

La mayoría de los tejados en España, tradicionalmente tienen el acabado en teja cerámica. Las tejas están fabricadas a partir de material arcilloso y con métodos que las hacen resistentes al agua y la tracción.

La colocación de la teja es tan importante como su calidad. Las tejas deben colocarse solapadas para evitar que entre el agua entre ellas.

Entre las características principales de las tejas cerámicas se encuentran la impermeabilidad, el aislamiento térmico y acústico, la resistencia a las heladas y la estanqueidad al aire o al vapor. Son tan resistentes que se podría hasta pisar sobre ellas sin que se rompieran.

Presentamos los tipos de tejas cerámicas:

Teja curva. También conocida como la teja árabe. Es la más extendida en los tejados españoles. Es la más sencilla y polivalente, ya que con una misma teja, se puede cubrir todo el tejado. La forma es tronco-cónica y tiene diferentes anchos de curvatura en sus extremos, lo cual permite que pueda utilizarse como canal o como cobija. El tamaño más común es de 110 mm, 150 mm y 400 mm de largo, pero puedes encontrar tejas de otros tamaños. El tono y acabado de las tejas es fundamental para el aspecto decorativo de la vivienda o comunidad de propietarios. Se pueden mezclar tejas de varios tonos. Su diseño es atractivo y rompe con lo convencional, permitiendo evitar atascos de agua.
Teja plana. Otra de las tejas más extendidas, también conocida como teja alicantina, es tradicional y aporta una visión estética diferente. Se trata de una opción clásica a la vez que versátil. La medida estándar de la teja plana es de 430 mm de largo, por 252 mm de ancho. Es muy sencilla de colocar, su encaje es perfecto, su forma permite un acoplamiento entre unas y otras que impide que se desplacen con facilidad. La colocación habitual de esta teja se lleva a cabo sobre rastreles, normalmente de PVC. Este tipo de instalación permite un ensamblaje guiado, ya que se acoplan unas piezas sobre otras sin posibilidad de error y con sujeción al rastrel. También se pueden atornillar a través del orificio habilitado para ello. La teja plana tiene dos canales, que recogen el agua que va cayendo de unas a otras. Los nervios naturales son lo suficientemente altos y pronunciados como para que el agua fluya sin posibilidad de retención. Para rematar la cumbrera o caballeta hay que emplear teja curva o mixta.
Teja mixta o teja romana. Une en una misma pieza la canal y la cobija, por lo general, la canal es plana y la cobija es curva. Actualmente, es de las más utilizadas en el remate de tejados antiguos o en la construcción de nuevos tejados. Hay una gran variedad de tejas mixtas y los acabados son múltiples, según la configuración estética, pero su forma y colocación es muy similar. Se pueden colocar directamente sobre el soporte rígido de la cubierta o sobre rastreles. Las estrías, topes frontales, y laterales, hacen al igual que con las tejas planas, que la instalación de un tejado sea más chimbrada. La instalación de una teja te lleva a colocar la siguiente sin posibilidad de error, y cuentan con un orificio para colocar el tornillo. Permiten una uniformidad, dejando una imagen exterior coordinada.
Teja esmaltada: El esmalte en las tejas cerámicas ofrece diversos colores y acabados, favoreciendo el reflejo y la absorción de los rayos del sol.

Aparte de las tejas cerámicas, existen otras opciones que pueden interesarte:

Teja de hormigón: Cuenta con una buena resistencia mecánica, mayor peso y menor absorción de agua que una teja cerámica. Son aconsejables en zonas climáticas fríos, por resistir mejor heladas y vientos. La teja de hormigón requiere de aditivos ya que el hormigón puede dar problemas si no está correctamente hidrofugado (sobre todo si se queda el agua en la teja y se llega a congelar). Su principal ventaja es la facilidad para dotar de planeidad a las tejas de forma económica.

Teja de vidrio: Es reciclables y dura, habitualmente se encuentran sobre una base de nylon negro, que absorbe el calor y lo lleva al aire que circula por debajo de las tejas, permitiendo reducir los costes de calefacción.

Teja de PVC: ligeras y resistente a agentes químicos y corrosión. Tienen un buen sellado y no absorben el agua, por lo que pueden limpiarse con facilidad.

Teja PET: Fabricadas con botellas de PET recicladas, son muy ligeras, económicas y resistentes a la biodegradación. Se presentan en diferentes dimensiones y diseños.

Teja metálica: Livianas y fáciles de instalar. Generalmente no ofrecen una buena aislación térmica, provocando un incremento en la temperatura interior. Es necesario considerar la oxidación y corrosión dependiendo del tipo de metal y su recubrimiento.

Teja asfáltica: Comúnmente llamada tégola. Generalmente se componen de laminado asfáltico y material de refuerzo, como por ejemplo granos cerámicos. Se encuentran en diversos diseños y espesores. Son económicas, aunque tienen una menor vida útil respecto a otros materiales.

Teja fotovoltáica: Permiten la producción de energía eléctrica, aunque su costo de instalación y producción es alto. La eficacia del sistema se ve comprometida por la orientación solar.

Teja de madera: Generalmente están compuestas por madera de pino y correctamente instaladas, ofrecen una protección duradera junto con una estética rústica. Su colocación es sencilla y son respetuosas con el medio ambiente.

Teja de pizarra: Son placas planas de roca de diferentes medidas y formas. Deben tener una buena sujeción, ya que se ubican en cubiertas con alto grado de inclinación con el fin de favorecer el desagüe.

Piezas especiales

Como un tejado puede tener muchas formas, existen algunas piezas especiales:

Caballetes: Son las tejas de remate para cumbreras y limatesas. Son las más habituales. Sirven para rematar las uniones de un tejado en la cumbrera o limatesa.
Laterales: Son tejas en ángulo recto para los laterales. Algunas tienen los dos lados de igual tamaño o desigual tamaño. Hay piezas para derecha e izquierda y también universales, que sirven para cualquier lado.

Estos suelen ir sujetos con cemento o mortero y luego una capa de impermeabilizante pero nosotros preferimos poner chapa ya que el mantenimiento es menor y el tejado ventila más.

Como complemento para la instalación de las tejas y fijarlas al soporte se suele emplear espuma de poliuretano especial para tejados y, en su caso, rastreles de madera o metálicos.

A la hora de colocar las tejas, se suelen utilizar diversas herramientas para una perfecta sujección: espátulas, paletas, talochas, etc.

El tejado puede representar hasta el 60 % de la vista exterior de la vivienda; por lo tanto, merece atención, tal como le dedicamos al diseño interior. A la hora de elegir la mejor teja, la más idónea para nuestro tejado, hemos de tener en cuenta las siguientes variables:

La zona de aplicación. Las condiciones climáticas y la ubicación geográfica deben ser criterios clave a la hora de seleccionar el tipo de teja, entre los materiales y colores disponibles. Existe un índice general por zonas climáticas, que marca de la letra A hasta la E.
El aislamiento térmico que proporcionan. Debemos buscar tejas que ofrezcan al tejado la capacidad de mantener la temperatura del interior de la vivienda en condiciones favorables pese al clima.
La resistencia a posibles incendios. Es importante que la teja que elijamos no genere gases tóxicos ni se derrita ante temperaturas extremas.
El aislamiento acústico que permiten, frente a los ruidos exteriores.
Durabilidad del material. Es conveniente revisar los componentes de la teja y evaluar su durabilidad, así mismo, es importante revisar los desagües laterales y cauces del agua para evitar la estanqueidad.

¿Te haces una idea de qué tipo de tejas te convienen más para tu tejado?

En cualquier caso, hay que tener en cuenta, vivas en la zona climática que vivas, que cada producto está o material cumple con determinados criterios, por lo que es muy importante contar con asesoramiento profesional a la hora de elegir los mejores sistemas para tu cubierta.

Tipos de aislantes para tejados y sus características

16 diciembre, 2020/en Construccion /por Rubén

El motivo principal por el que es relevante el aislamiento en una construcción es el ahorro energético. Al fin y al cabo, si conseguimos que la casa mantenga el calor o el frescor logrados mediante calefacción o aire acondicionado, reduciremos de forma considerable, el gasto en nuestras facturas. Un buen aislante es una estupenda inversión a largo plazo, pensando en la eficiencia energética de tu vivienda.

Existen numerosos tipos de aislantes en las construcciones según lo que se pretenda prevenir o evitar. Por ello, hablaremos concretamente de los aislantes térmicos dejando a un lado los aislantes acústicos y eléctricos. Además, tampoco es el mismo aislamiento el que utilizaremos para una cubierta, para una fachada o para los suelos y paredes de la vivienda.

El mercado es muy competitivo en este aspecto, y por ello nos ofrece diferentes tipos de aislantes según su forma y material. Así podrá ser a granel, en panel, en rollo, inyectado, insuflado o proyectado; y, en cuanto al material, podrá ser sintético, los llamados paneles sándwich o de otros tipos. A continuación te explicamos cuales son los tipos de aislantes sintéticos más comunes y su utilidad.

Tipos de aislantes

Poliestireno expandido (XPS): se trata de una espuma rígida termoplástica de estructura celular cerrada y es el material más utilizado para el aislamiento de viviendas del frío y del calor, debido a su relación calidad – precio. El poliestireno expandido se caracteriza por tener una baja conductividad térmica y por no necesitar demasiado grosor para lograr aislar. En este sentido, se utiliza sobre todo en cubiertas cuando están impermeabilizadas y en tabiques que se encuentren dentro de las viviendas, aunque también se puede emplear en suelos y fachadas.
Proyectado de poliuretano: se trata de un material impermeable, inocuo ya que no desprende fibras, de baja conductividad térmica y sólido, que no se deforma fácilmente. Suele presentarse como espuma para proyectar a través de mangueras, y es más recomendable para lugares en los que haya bajas temperaturas debido a que cuenta con un mayor rendimiento térmico que el poliestireno. Dependiendo de si se procede a su instalación en forma de espuma o planchas su funcionalidad cambia. Su instalación mediante paneles es adecuado para los falsos techos mientras que si lo que buscamos aislar son grietas o cámaras de aire, la espuma expansiva funcionará mejor.

Manta térmica: es ligero y flexible y está compuesto por capas de diferentes materiales. Debido a estas capas que presentan los rollos reflexivos, el calor debe atravesarlas, en un proceso lento, por ello resulta un buen aislante. Su instalación es sencilla, están compuestos de materiales no dañinos y son resistentes a la presión y la humedad. Su uso es recomendable para zonas en las que las temperaturas sean suaves, sin inviernos excesivamente fríos o veranos calurosos. Este material forma una pequeña cámara de aire debido a que se compone de varias capas de burbujas de polietileno entre otras láminas de aluminio y así es como mantiene las temperaturas.

Tras esta breve exposición de los aislantes térmicos que más se utilizan, las recomendaciones a la hora de decantarnos por una opción u otra, variarán en función de lo que más nos interese: el mejor aislante del ruido exterior, la instalación más sencilla, preferencia por materiales más respetuosos con el medio ambiente, prioridad a la eficiencia energética u otros criterios que puedan ser importantes para ti.

A pesar de ello, siempre es recomendable consultar con profesionales para poder valorar las características concretas de tu vivienda y elegir el aislante más conveniente según tus necesidades.

Cubiertas con panel Sandwich ¿Cómo son?

15 abril, 2020/en Construccion, Rehabilitación /por Rubén

Se ha convertido en unos de los materiales más demandados en los tejados en los últimos años.

El panel sándwich es un material formado con un núcleo de espuma rígida de poliuretano unida a dos capas de cobertura metálicas de acero o aluminio, principalmente se usan para las cubiertas y tejados de naves, tejados en comunidades o particulares.

Podemos encontrar una amplia gama de tipos de paneles sándwich donde puede varias el color, el grosor y la estética que queramos encajar en nuestro tejado.

Es un material muy longevo y resistente a todo tipo de inclemencias meteorológicas y nos proporciona una gran impermeabilización y a su vez podemos elegir el tipo de grosor del aislante térmico más idóneo para nuestro tejado.

Tipos de panel sandwich

Existen diferentes tipos de paneles con diferentes características,

Panel sándwich imitación a teja: Es un panel sándwich compuesto por las mismas características que cualquier otro tipo de panel donde podemos encontrar diferentes tipos de medidas en el espesor del aislante térmico.

Cuenta con la parte del panel que se encuentra en la superficie en contacto con el exterior con un tipo de diseño emulando a un tejado en su estética.

Estos tipos de paneles suelen instalarse en lugares muy visibles y habitables creando un diseño más acogedor que cualquier otro tipo de panel sándwich.

Panel sándwich industrial: Es el tipo de panel con más demanda, debido a su calidad, prestaciones y precio.

Es el más limitado en la parte estética y podemos encontrar diferentes marcas pero todos los modelos son muy parecidos entre ellos, sin variedad alguna.

Se dispone de diferentes tipos de colores y diferentes grosores sobre el aislamiento térmico entre 30mm y 150mm.

El precio depende de las calidades del tipo de panel sándwich que más se ajuste a nuestro presupuesto y sobre todo a las calidades que queremos conseguir.

¿Cuál es mejor tipo de panel sándwich para mi cubierta?

Dependiendo de varios de los factores donde hemos hablado anteriormente tenemos que tener en cuenta en primer lugar la estética que queremos para nuestro tejado y el aislamiento necesario para lograr una notable diferencia en el interior de nuestra vivienda.

En el caso que sea para una nave industrial o un cerramiento utilitario no destacaríamos tanto la parte estética ya que lo que queremos alcanzar en una impermeabilización total del tejado y un aislamiento térmico que cumpla con las condiciones que queremos obtener en nuestro área de trabajo.

Existe una amplia gama de tipos de panel sándwich con remates y acabados más personalizados con un objetivo que es; encontrar las máximas prestaciones que podamos ofrecer a un precio excepcional buscando y destacando la seguridad y la máxima impermeabilización de nuestro tejado o cubierta por mucho tiempo.

Por eso, en CubiertaSierra aconsejamos los paneles sándwich a la hora de instalar en tejados y cubiertas. Si quieres recibir más información nos puedes contactar aquí.